El día de ayer me hackearon la cuenta de Epic Games y la vendieron en una web rusa por 3 euros

123456 prosigue siendo la clave de acceso más usada, por increíble que parezca. Es una cosa que no dejo de rememorar y que mis profesores de Administración de Sistemas Informáticos remarcaron, entre risas, sobre la relevancia de crear una clave de acceso segura, como por poner un ejemplo con caracteres alfanuméricos, el empleo de diferentes símbolos y sin proseguir un patrón simple de descubrir a simple vista, vaya.

En mi caso empleo diferentes reglas mnemotécnicas de lo más rebuscadas que únicamente conozco , mas no existe nada que garantice una seguridad al 100%. Ni tan siquiera con la autentificación de 2 pasos. Y si no, que se lo afirmen a nuestro compañero de playjuego.com Mario Merinowski, al que le hackearon el día de ayer su cuenta en Epic Games para venderla después en una web rusa por unos pobres tres euros.

Tu clave de acceso se cambió satisfactoriamente

El primer punto que deja entrever que a Epic Games aún le falta por prosperar su seguridad, es que Mario recibió directamente un aviso a su correo diciendo que se había alterado su clave de acceso adecuadamente, sin ni desee darle un preaviso de que se había conectado alguien desde Rusia para acceder a su cuenta.

Tanto en Google como en Steam o bien Netflix, por refererir 3 servicios diferentes, toda vez que accedo desde un equipo que no está registrado, siempre y en toda circunstancia me llega una notificación al correo con los datos de la IP y a qué urbe pertenece (si bien esto se pueda disfrazar utilizando una VPN, mas ese es otro tema), por de producirse un acceso a nuestra cuenta sin nuestro permiso para poder avisarlo de forma inmediata a la compañía que nos facilita ese servicio. Sería lo idóneo, desde entonces.

Sin embargo, como afirmamos, esto no se generó en el caso de Mario, con lo que preguntó primero a sus compañeros en un conjunto de WhatsApp por si acaso era un fallo general, pues no es la primera vez que hay inconvenientes con la seguridad y se solicita a los usuarios que cambien su clave de acceso. La diferencia radica en que en un caso así, la clave de acceso se cambió de manera directa sin el permiso de Mario, que dejó claro que llevaba «más de un mes sin jugar a nada de Epic Games». Esto olía a chamusquina. Y justo un día siguiente recibió un correo de un tal barsuchiy niktar.

Cuando descubres el pastel. Te debes reir

Esa persona, que no parecía el habitual bot teniendo presente el nombre de su cuenta y el dominio del correo registrado, se puso en contacto con Mario para demandarle la nueva clave de acceso, extrañado por haberla comprado desde una página rusa (epicgames.su, como explicó en una charla siguiente) por la mísera cantidad de 259 rublos (dos,99 euros) y sin poder acceder a la cuenta.

¿El motivo? Cuando Mario se olió el pastel, tras el aviso de sus compañeros, entró en la página web de Epic Games para darle a «olvidé mi clave de acceso» a fin de que se produjese otra y que llegara a su correo, para mudarla después y regresar a activar la autentificación en 2 pasos. Y también insistimos, ya la tenía activada en primera instancia.

De ahí que el tal barsuchiy niktar, tras haber comprado la cuenta de Mario en una web rusa, no pudiera acceder a dicha cuenta al tener otra clave de acceso diferente. Y de ahí que le demandaba al propio Mario que le dijera cuál era la nueva clave de acceso por el hecho de que «le terminaba de vender la cuenta y resulta injusto» que no pudiera jugar al Fortnite con su nueva cuenta, que por algo pagó para tener cien skins.

La charla prosiguió, Google Traductor mediante, de una manera irónicamente civilizado, mas entre la incredulidad de Mario ante esa situación tan surrealista, explicándole a barsuchiy niktar que había comprado su cuenta de forma ilegal, instándole a que se pusiera en contacto con la citada web rusa por si acaso le devolvían el importe de su adquiere. Pues hasta barsuchiy niktar le rogó que le diera la clave de acceso por el hecho de que le tenía «mucho cariño» a dicha página. Mas ni con esas, claro.

Al final todo se quedó en un susto para Mario, mas nos vuelve a rememorar la necesidad de que se fortalezcan las medidas de seguridad, aun si bien tengamos activada la autentificación en 2 pasos. Y nada de 123456, por favor.

Imagen | Wikimedia Commons (Psyomjesus)

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